Es mucho lo que el papa Francisco ha escrito sobre la familia. No es para menos. La familia, aunque en crisis, sigue siendo el lugar donde es formado un individuo. Es en el núcleo familiar donde se forja nuestro carácter, como dice el Papa: “La familia es condición necesaria para que una persona tome conciencia y valore su dignidad”, para él “es el centro de la vida humana”. En sus escritos y discursos, el Papa nos habla de la importancia de la familia en la sociedad y nos ofrece consejos para vivir en y como familia.
El Concilio Vaticano II definió a la familia como “la Iglesia doméstica” porque es en el seno familiar donde se deben enseñar y aprender nuestros valores cristianos. El papa Francisco nos habla de vivir la fe en familia. Afirma que "la familia que vive la alegría de la fe, la comunica espontáneamente, es sal de la tierra y luz del mundo”. Para ello tenemos que conocer y profesar nuestra fe. ¿Qué nivel de fe tiene nuestra familia? ¿Comunicamos nuestra fe con gozo y alegría? ¿Ayudamos a las familias de los niños que catequizamos a mantener su fe? Estas son peguntas que debemos formularnos para poder ayudar a las familias a responder a su llamado.
Entre los consejos del Papa está la oración. Él pone énfasis en rezar en familia para conservar la fe. Esto me recuerda a otro consejero, el padre Payton, quien decía: “La familia que reza unida, permanece unida”. Es ese quizás el elemento que hace falta. En el mundo de hoy no tenemos tiempo. Lo primero que dejamos de hacer es rezar y eso nos debilita y debilita nuestros lazos de familia. ¿Cómo ayudar a las familias a “rezar unidas”?
Como catequistas tenemos la responsabilidad de ayudar a las familias de los niños a quienes catequizamos a, no solo entender su papel en la educación en la fe de sus hijos sino también, darles ideas de cómo hacerlo. Quizás puede ayudar a empezar una campaña de oración para nuestras familias enviando a la casa, todas las semanas, una oración corta que las familias puedan hacer todos los días. Esta puede estar relacionada con el ciclo litúrgico, o una oración para antes de comer o irse a dormir. Esto se puede hacer con los niños del programa de educación religiosa o para toda la parroquia. Anímese.
Dediquémonos a difundir y aplicar el valor de la familia mediante la oración y el diálogo y juntos podamos crear un ambiente de mejor relacionamiento con Dios. Descargue e imprima la Estampa de oración Unidad en la familia y compártala en familia.