Los sacramentos de la Iglesia Católica unen a los católicos de todo el mundo con Jesucristo y unos con otros. Cada uno de los siete sacramentos fue instituido por Jesús y dado a nosotros para que a través de ellos podamos compartir la vida de Dios. En este artículo puede descargar una actividad de arte que invita a la reflexión en torno al significado de cada uno de los siete sacramentos para las familias, la escuela, las parroquias y las comunidades. El resultado es una “colcha” de papel para exhibir y compartir.
Los siete sacramentos de la Iglesia Católica unen a todos los católicos con Jesucristo y unos con otros. Los sacramentos son las celebraciones más importantes de la Iglesia, siendo el sacramento de la Eucaristía la fuente y cumbre de la vida cristiana.
Los sacramentos son llamados signos eficaces porque realizan lo que significan.
Los sacramentos nos dan la gracia, el don de compartir la vida de Dios y la aptitud de llevar una vida digna del Dios que nos llama. Los sacramentos de iniciación cristiana (Bautismo, Confirmación y Eucaristía) nos llevan a la plenitud de la vida con Dios y nos inician como miembros de la Iglesia. Los sacramentos de sanación (Penitencia y Unción de los enfermos) nos restauran y reconcilian con Dios y nos fortalecen en cuerpo y alma. En los sacramentos de servicio—Matrimonio y Orden sagrado—somos testigos y celebramos el llamado al amor y al ministerio de las personas casadas y de los obispos, presbíteros y diáconos.
Una comprensión fundamental de estos sacramentos (iniciación, sanación y servicio) comienza temprano en la vida de un niño y progresa a medida que madura en la fe. Este proceso que dura toda la vida hace que la presencia de la vida de Dios en nosotros y entre nosotros sea maravillosa. Repase los siete sacramentos a continuación y luego descargue cada una de las actividades imprimibles de la Colcha de los sacramentos. Siga las instrucciones para armar y compartir el producto terminado con y en su comunidad.
Los sacramentos nos dan la gracia, el don de compartir la vida de Dios y la aptitud de llevar una vida digna del Dios que nos llama.
Los tres sacramentos de iniciación son el Bautismo, la Eucaristía y la Confirmación. Estos son los sacramentos que inician a los católicos en la Iglesia.
El Bautismo es el primer sacramento que recibimos los católicos. Durante el Bautismo, la inmersión en el agua simboliza morir al pecado y resucitar a una vida nueva en Cristo, purificado y santificado. El Bautismo es el primero de los siete sacramentos que recibimos los católicos. En este sacramento, los bautizados son bienvenidos en la Iglesia y se convierten en hijos de Dios. Aunque muchos católicos son bautizados cuando son bebés o niños pequeños, una persona puede ser bautizada a cualquier edad.
La gracia recibida por primera vez en el Bautismo crece en quienes celebramos el sacramento de la Eucaristía. La Eucaristía es fuente y cumbre de la vida cristiana. A través del sacramento, estamos más estrechamente unidos a Jesucristo y unos a otros como Cuerpo de Cristo, la Iglesia. La Eucaristía fortalece a los católicos para servir a Dios y preocuparse por las necesidades de los demás. La Eucaristía es el único sacramento de iniciación que los católicos celebramos una y otra vez. En la Misa, los católicos recibimos a Jesucristo, el Pan de Vida en Sagrada Comunión y nos nutrimos de la Palabra de Dios.
Al igual que el Bautismo, la Confirmación es un sacramento que los católicos recibimos solo una vez. El sacramento de la Confirmación nos sella con el Don del Espíritu Santo, profundizando la gracia bautismal. Aquellos que reciben el sacramento de la Confirmación se vuelven más parecidos a Cristo y se fortalecen para ser testigos activos de Jesucristo.
Hay dos sacramentos de sanación: Penitencia y Reconciliación y Unción de los enfermos. Ambos sacramentos pueden celebrarse más de una vez; los católicos estamos llamados a celebrar periódicamente la Penitencia y la Reconciliación.
El sacramento de la Penitencia renueva nuestra gracia, fortaleciéndonos para vivir según los mandamientos como discípulos de Jesús. Durante el sacramento de la Penitencia, los miembros de la Iglesia nos reconciliamos con Dios y la Iglesia después de confesar nuestros pecados y los sacerdotes perdonan los pecados en el nombre de Cristo y la Iglesia mediante el poder del Espíritu Santo.
La Unción de los enfermos es un sacramento que da a aquellos que están muy enfermos o cerca de la muerte la gracia de responder a su enfermedad con esperanza y fe en un Dios amoroso. El sacerdote unge al enfermo y a todos los reunidos, incluidos los amigos, los familiares y la comunidad parroquial, y rezan por la sanación.
Los dos sacramentos al servicio de la Comunión son el Matrimonio y el Orden sagrado. Aquellos que reciben estos sacramentos se fortalecen para servir a Dios y a la Iglesia a través de una vocación particular: como matrimonios, o como diáconos, presbíteros y obispos.
En el matrimonio, la novia y el novio son los celebrantes, unidos a través del sacramento como compañeros amorosos y fortalecidos para vivir sus promesas a Cristo y el uno al otro. En el Orden sagrado, los bautizados reciben la gracia para desempeñar su ministerio entre los fieles y quedan impresos con un carácter sacramental indeleble.
Reflexionar sobre el significado del sacramento para cada uno de nosotros es una experiencia que apoya nuestro propio camino de fe, tanto personal como comunitario. La Actividad Colcha de los sacramentos puede ser un proyecto realizado por individuos, familias o comunidades como escuelas o parroquias.
La definición simple de colcha es un cobertor o cubrecama cálido cosido en capas. Las colchas son símbolos de los valores y la herencia familiar y llevan la connotación de comodidad, amor y tradición. También representan conexiones. Las colchas suelen ser reliquias heredadas, transmitidas de generación en generación. Las colchas hechas a mano son obras de arte únicas y hermosas.
La Actividad Colcha de los sacramentos es una oportunidad para reflexionar y luego representar cada sacramento como un cuadro en una colcha de papel. Los cuadros de colchas individuales pueden ser completados y organizados por individuos, familias o comunidades. Cada cuadro tiene un diseño único con un hilo unificador que representa el sacramento de la Eucaristía, central en el tejido de nuestra fe. Una colección de cuadros de la Colcha de Sadlier crea una colcha de papel que puede diseñar y compartir con su comunidad.
Aquí tiene cuatro ideas para construir su Colcha de los sacramentos de Sadlier:
Reúna todos los cuadros de la Colcha de los sacramentos en http://www.sadlierreligion.com/ColchaDeLosSacramentos.
1. Organice un servicio de oración en su parroquia o escuela católica. Antes del servicio de oración, distribuya los cuadros de la colcha de la actividad a todos los participantes. Invítelos a tomarse el tiempo para completarlos con anticipación. Si está en una escuela católica, esto podría convertirse en un proyecto en el que cada grado se centre en un sacramento, o en el que los profesores trabajen con los estudiantes de educación religiosa para completar cuadros como una actividad de reflexión. Si está en una parroquia, esto podría convertirse en un proyecto en el que los miembros de la familia completen un conjunto de cuadros que reflejen su experiencia compartida de los sacramentos. Los participantes deben traer cuadros completos al servicio de oración. Durante el servicio de oración, incluya oraciones de o sobre cada uno de los siete sacramentos. Invite a los participantes a acercarse y unir sus cuadros en el momento adecuado. (Asegúrese de proporcionar cinta u otros materiales para unir los cuadros durante el evento).
2. Programe una minisesión “club de colchas” organizada en un salón parroquial o en un programa de enriquecimiento de una escuela católica. Cada semana, concéntrese en los sacramentos de las descargas de la Actividad Colcha de los sacramentos. Tómese un tiempo para compartir información sobre el sacramento y luego invite a la reflexión y la conversación. Proporcione materiales de arte, y tiempo para crear y completar el cuadro de colcha apropiado en cada sesión. Haga que los participantes construyan su colcha de papel a lo largo de la sesión. Proporcione marcos o sugerencias para que los participantes exhiban sus proyectos de colchas terminados en la casa.
3. Envíe un conjunto de cuadros de colcha a la casa con cada estudiante o familia en su escuela o programa de educación religiosa parroquial. Dedique un gran espacio visible para los visitantes de su comunidad para armar una colcha de los sacramentos comunitaria. A medida que las familias completen los cuadros, agréguelos a su colcha comunitaria y observe cómo crece. Incluso puede tener varias colchas organizadas por grado, sacramento o por mosaicos. Cuando estén completas, invite a las familias a caminar y admirar las colchas de los sacramentos.
4. Agregue sus cuadros familiares o comunitarios completos a una colcha virtual compartiendo sus cuadros de colcha en las redes sociales. Etiquete a @SadlierReligion y use el hashtag #SadlierSacramentsQuilt para ser destacado y ver crecer una Colcha de los sacramentos global.
En Resumen
Los siete sacramentos nos unen a Jesucristo y unos con otros. La Actividad Colcha de los sacramentos invita a la reflexión sobre cada uno de los sacramentos y se convierte en un mosaico comunitario que celebra las conexiones y la presencia de la vida de Dios en nosotros.